A 300 kilómetros de la costa de Mar del Plata, aguas adentro, el portaaviones nuclear norteamericano USS George Washington, con una tripulación de 5400 marinos, comenzó los ejercicios militares con barcos de la Armada Argentina. Hacia el lugar llegaron en helicópteros mide las Fuerzas Armadas de ambos países la canciller Diana Mondino; el ministro de Defensa, Luis Petri, y el embajador de los Estados Unidos, Marc Stanley, testigos de los primeros desplazamientos del monumental navío, que por sus dimensiones no puede amarrar en ningún puerto del país.
Según pudo saber LA NACION, también participó del comienzo de los ejercicios el general James C. Slife, vicejefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, además de los comandantes de las embarcaciones. El día anterior, el titular de la misión diplomática recibió al jefe militar norteamericano en la embajada y destacó que su visita “pone de relieve el compromiso de nuestro país de reforzar la colaboración con la Argentina para hacer más segura nuestra región”.
“Estamos fortaleciendo la cooperación marítima internacional del lado de la libertad”, declaró Petri antes de embarcar.
Los ministros Petri y Mondino partieron de Aeroparque, en aviones de la Fuerza Aérea, rumbo al aeropuerto de Mar del Plata, donde embarcaron junto a autoridades militares norteamericanas en helicópteros MH-60S Seahawk americanos y UH-3H Sea king argentinos, que los condujeron al portaaviones. Según trascendió, la embajada norteamericana también había invitado a la vicepresidenta Victoria Villarruel y al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, pero ninguno de ellos pudo concurrir por problemas de agenda.
El portaaviones USS George Washington, que participa de la misión Southern Seas 2024, llegó al espacio marítimo argentino escoltado por el destructor USS Porter y el buque logístico USNS John Lenthall. Los ejercicios con la Armada Argentina llevan el nombre Passex “Gringo-Gaucho II”.
Por parte de la Armada Argentina intervienen los destructores ARA La Argentina y ARA Sarandí, las corbetas ARA Espora y ARA Rosales, los patrulleros oceánicos Contraalmirante Cordero, Piedrabuena y Storni, dos helicópteros Sea King H3, un helicóptero Fennec, un avión de exploración o vigilancia marítima B-200 y dos aeronaves turbomentor. En conjunto llevan una dotación de 750 marinos.
Como parte de las actividades destinadas a fortalecer los vínculos entre la Argentina y los Estados Unidos, entre hoy y mañana realizarán varias operaciones, como enlace y chequeo de comunicaciones, evoluciones y formaciones tácticas, despegue y anavizaje de aeronaves desde el portaaviones, entre otras prácticas de vuelo.
También se llevarán adelante ejercicios antiaéreos y antisubmarinos, traspaso de carga entre buques a través de guías, prácticas efectivas de Cross Deck (despegue y anavizaje de helicópteros entre unidades), con el fin de “reforzar la interoperabilidad entre ambas armadas”.