NUEVA YORK.– Javier Milei arrancará este lunes su primer día de la agenda oficial en Nueva York muy temprano y con otra foto icónica para su presidencia: irá a Wall Street para tocar la campana de apertura del New York Stock Exchange, un rito simbólico que se repite a diario –salvo los feriados y fines de semana– para abrir las operaciones bursátiles en uno de los mercados más importantes y ajetreados de las finanzas globales.
No será el primer presidente argentino que lo hace: Néstor Kirchner ya lo hizo en 2006, junto con la entonces primera dama y senadora, Cristina Kirchner.
La visita de Milei a la Bolsa neoyorquina marcará el puntapié de su sexto viaje –y quizá el más importante– a Estados Unidos desde que asumió la presidencia, un paso relámpago por Manhattan de tres días en el que verá a inversores, empresarios, incluido su tercer encuentro con Elon Musk, analistas y referentes de política exterior, mantendrá reuniones bilaterales y dará su primer discurso ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Milei será, este año, una de las atracciones del cónclave de líderes globales.
Tal como ha ocurrido en otros viajes, Milei pasó la mayor parte del día en el hotel The Langham, ubicado en Midtown, Manhattan, sobre la 5ª Avenida, puliendo la agenda con sus asesores y retuiteando varias publicaciones en X, antes Twitter.
Cuando caía la tarde, vestido de traje, Milei salió a un encuentro con periodistas del New York Times. Se sacó un par de fotos con curiosos ante la mirada de varios de los integrantes de la comitiva oficial. Más temprano, Milei había ido a visitar El Ohel, la tumba del rabino Menachem Mendel Schneerson, conocido como el rebe de Lubavitch, un hábito cada vez que pisa Nueva York.
Los reposteos de Milei recorrieron un abanico de temas, desde comentarios de cuentas afines al oficialismo, clips de programas de televisión o artículos periodísticos hasta estadísticas sobre el dólar o los ahorros que los argentinos mantienen en el exterior.
Una de sus primeras actividades en Nueva York fue un desayuno con el economista Alberto Ades, managing director de NWI Management, y quien antes pasó por Goldman Sachs, Citi y Bank of America.
De ese encuentro participaron la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; el embajador argentino en Washington, Gerardo Werthein, y el asesor presidencial Demian Reidel. La charla recorrió la realidad política y económica de Estados Unidos y la Argentina.
“Desayuno de trabajo en NYC con mi gran amigo y presidente de todos los argentinos @JMilei, el embajador Gerardo Werthein, @dreidel1 y Karina. Un privilegio intercambiar opiniones con ellos sobre la coyuntura económica y política en nuestro país y los EEUU”, publicó Ades en X, junto con una foto de Milei.
Además de tocar la campana, Milei disertará este lunes ante inversores, una de las primeras oportunidades para exponer sobre el panorama y los planes de la economía ante los hombres y mujeres de negocios de la Gran Manzana.
Al mediodía, Milei se verá con Musk y, por la tarde, dará otra presentación, cerrada, en el Council on Foreign Relations (CFR), un prestigioso think tank especializado en la política exterior de Estados Unidos y las relaciones internacionales. Musk se ocupó de levantar la temperatura para la cita al retuitear una publicación de Steven Mark Ryan –un productor de contenidos de negocios con un canal en YouTube sobre Musk y Tesla con 275.000 suscriptores– con elogios a la gestión de Milei.
La agenda de este lunes estará mucho más apretada. Y uno de los eventos estelares no tendrá a Milei como protagonista, sino al ministro de Economía, Luis Caputo, quien verá a inversores y analistas en un almuerzo privado organizado por el banco de inversión JP Morgan en Manhattan.
Ese día, Milei tendrá también una reunión con el vicepresidente de Política Global y Asuntos Gubernamentales de Google, Karan Bhatia, y luego se abocará a la agenda en las Naciones Unidas. Milei dará su discurso en el primer día del debate general de la 79º Asamblea General de las Naciones Unidas, por la tarde. El tema de este año es: “No dejar a nadie atrás: actuar juntos para promover la paz, el desarrollo sostenible y la dignidad humana para las generaciones presentes y futuras”. Milei tendrá además dos reuniones bilaterales: verá al presidente de la República de Ecuador, Daniel Noboa, y a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Milei y su equipo terminaban ayer de delinear el discurso. Se abocará a marcar los lineamientos de la política exterior de la Argentina, y muy probablemente reitere su respaldo a Ucrania, ante la agresión de la Rusia de Vladimir Putin, y a Israel, luego del ataque terrorista de Hamas del pasado 7 de octubre, que desató una nueva y sangrienta guerra en la Franja de Gaza. Y se espera también que Milei renueve una vez más el reclamo argentino por la soberanía de las Islas Malvinas.
Desde el Gobierno también deslizaron que Milei va a cuestionar de manera directa el actual papel de los organismos internacionales y el impulso de Agenda 2030.
El Presidente, contaron cerca suyo, cuestionará la actitud “pro-China” de la ONU y expresará la necesidad de la defensa de los “valores de Occidente”.