Mientras el kirchnerismo presiona por constituir la comisión bicameral de Inteligencia del Congreso, el interventor de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Federico Sívori, afirrmó que el presupuesto del organismo para este año es de “un total de 19 mil millones incluyendo gastos reservados que no llegan a $1.500 millones, es decir menos del 10 por ciento del total”. O un poco más de U$S 1,5 millones de dólares.
La AFI no debe rendir cuentas sobre los gastos reservados porque se supone son para financiar agentes encubiertos u operaciones secretas sobre el terrorismo internacional. Los esfuerzos de Sívori están dirigidos fundamentalmente a la zona de la Triple Frontera, desde donde se apoyó los atentados de la Jihad Islámica del Hezbollah del Líbano contra la embajada de Israel (1992) y la AMIA (1994).
La prioridad de Sívori “es prevenir un eventual tercer atentado”, sobre todo después de que el presidente Javier Mileil alineó su política exterior con la de Estados Unidos e Israel, reveló una alta fuente del Gobierno a Clarín.
Sin embargo, los gastos reservados hasta el crimen de Alberto Nisman eran usados como una “caja” de la política para financiar campañas electorales o financiar campañas sucias en medios o redes sociales. Hoy sería el financiamiento de trolls en X o Tik Tok.
Un ex titular de la SIDE se extrañó por ese bajo monto de gastos reservados para hacer inteligencia sobre el terrorismo internacional. «Puede ser que hayan achicado los recursos propios para esas tareas de prevención y descansen demasiado en las alertas de la CIA y el Mossad», advirtió ese ex jefe de espías.
El hombre de confianza del jefe de Gabinete, Nicolás Posse,Sívori quiere «reconstruir» la AFI luego de la crisis en que la dejó el kirchnerismo sobre todo por la filtración de los nombres de más de 2 mil agentes y analistas durante la gestión de Cristina Caamaño.
Sívori envió esta semana la rendición de gastos de “la Casa” a la comisión Bicameral de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia.
En la última ampliación de partidas, la AFI paso “de 15.557.781.584 pesos (presupuesto 2023 que se repitió para 2024 a pesar del 211% de inflación interanual) a 19.355.781.584 pesos”. “Es decir un aumento del 24%, muy por debajo de esa inflación”, afirmó a Clarín una fuente del organismo.
Sívori firmó la rendición de cuentas de marzo que se manda al Congreso, mientras espera que se conforme la comisión bicameral.
La información “presentada incluye información de ingresos y egresos presupuestarios con apertura por inciso, discriminando el monto ejecutado en concepto de gastos” y es de carácter reservado.
Ante críticas de la oposición, una fuente del organismo explicó que “la distinción entre partidas públicas y fondos reservados son las que establece el artículo 38 bis de la Ley Nº 25.560, modificada por la Ley 27.126 y se mantuvo en la gestión de Alberto Fernández (Decreto Nº 331 del 29 de junio de 2023)”. La gestión de Caamaño “redujo pero no eliminó los gastos reservados”, subrayó la fuente.
“Hoy se utiliza el mismo régimen de fondos que en la gestión anterior. Así está reflejado en la intervención dispuesta por el gobierno de Milei (Decreto N.º 22 del 12 de diciembre de 2023), que definió que hasta tanto se apruebe un nuevo régimen de fondos, se utilice el aprobado por la gestión anterior (art. 6 del decreto mencionado)”, contó.
En realidad, “hay un recorte en los fondos de la Agencia, al funcionar con el mismo presupuesto asignado que en el año 2023 y considerando una inflación +211% interanual a diciembre”, agregó la fuente de la AFI.
Pero desde ministerio de Economía “hubo una actualización de partidas para toda la administración pública (incluyendo AFI) pero no empata con la inflación” del período, contó la fuente de la AFI.
En tanto, el ex presidente de esa comisión, el ultra K Leopoldo Moreau, afirmó que “si el Gobierno duplica la partida de los gastos reservados, con más razón debería activarse el control parlamentario”. Moreau usó entre el 2019 y el 2023 la bicameral como un ariete contra jueces y fiscales que investigaron a la ex presidente que incluyó una serie de escándalos.
Mientras legisladores de la LLA, del PRO y la UCR intentan sacarle al kirchnerismo, por primera vez en cuatro años, la presidencia de la comisión a Moreau -quien tiene línea directa con Cristina Kirchner- y dársela a un senador del oficialismo.
La constitución de la bicameral de la deben hacer los presidentes de las Cámaras de Diputados, Martín Menem y del Senado, Victoria Villarruel. Tienen que nombrar siete por cada cuerpo. Villarruel ya nombró a los senadores Edgardo Kueider (Unidad Federal); Enrique Goerling Lara (Pro); Edith Terenzi (UCR) y Mariana Juri (UCR). Falta que el bloque de Unión por la Patria, que responde a Cristina Kirchner, envía sus nombres. Goerling Lara podría terminar siendo elegido el nuevo presidente, según una fuente parlamentaria.
En cambio, Menem en la Cámara de Diputados les mandó a decir a los legisladores que postergó ese trámite hasta después del tratamiento de la Ley de Bases que se votó ayer. De todos modos, se da por descontado que el ex ministro de Seguridad y diputado del PRO Cristian Ritondo será uno de los propuestos por Menen.
Por su parte, el presidente del bloque de diputados de Unión por la Patria (UxP), Germán Martínez, mandó una nota a Menem en la que afirma que “no hay razón alguna para que el conjunto del Sistema de Inteligencia Nacional deba continuar sin el debido control parlamentario luego de tantos meses. Máxime cuando la comisión en cuestión reviste el carácter de permanente”.
Por otra parte, la senadora nacional de Unión por la Patria (UxP), Juliana Di Tullio afirmó que la AFI le hizo espionaje ilegal. En su cuenta de X escribió: “Hola Agencia AFI, ojalá que pincharme el teléfono les sirva para algo más que escuchar mis puteadas al gobierno. Amén de mis conversaciones personales, claro. Hace añares que tengo el mismo número y me niego a entregarles mi vida”.
Di Tullio apuntó contra Sívori, “un exfuncionario del macrismo y persona de confianza del jefe de Gabinete de Ministros Nicolás Posse, cuyo pliego aún queda pendiente de ingreso en la Comisión de Acuerdos del Senado de la Nación”.
En la AFI negaron haber intervenido el teléfono de Di Tullio y también financiar con los fondos reservados trolls mileístas en las redes sociales. La prioridad, reafirman las fuentes, es prevenir atentados terroristas. Y destacan que en pocos meses, el Gobierno logró la visita del jefe de la CIA, William Joseph Burns. La última presencia de un titular del organismo de inteligencia de EE.UU. había sido de León Panetta en el 2010.